n tiempos de la conquista, la región estuvo regida por el cacique Mabodomaca. Bajo la gobernación de don José Antonio de Mendizábal, se fundó el poblado de San Antonio de la Tuna en el 1725, junto al río Guajataca, bajo la jurisdicción de Arecibo. En el 1776, fray Iñigo Abbad describe la región como fértil y a sus pobladores como los más saludables de la Isla: A menos de una legua se encuentra la cuesta de Guajataca, muy pendiente y peligrosa cae sobre el río del mismo nombre; es de bastante caudal de aguas que son salobres, cualidad que reciben al paso por una cantera de piedra de sal, a poca distancia del pueblo de San Antonio de la Tuna, situado al lado izquierdo del río, en una corta llanura sobre la montaña tiene (c) una iglesia decente, con 60 casas; las demás hasta 204, habitadas por 1197 almas, están en sus estancias, que se extienden dos leguas, hasta la quebrada de los Cedros, en, donde crían los ganados y cultivan tabaco, algodón, café, arroz, frijoles, calabazas, sandías, melones y legumbres, con muchos pavos, gallinas y otras aves que bajan al puerto de la Aguada para los navíos que se detienen a hacerla. Esta circunstancia utiliza mucho a este pueblo, pues con facilidad venden sus frutos. Sus habitantes son de los más robustos y sanos, que hay en la Isla, bicn sea por el temperamento fresco de esta montaña o por el aire vegetal que respiran, o por otro influjo benéfico que les proporciona la inrnediación a los bosques. Se ven siempre en él algunos centenarios sin achaques y ágiles para las labores en que suelen ejercitarse, pasando alguna vez más de dos años sin morir alguno de este vecindario. En las primeras dos décadas del siglo 19, se independizaron los sectores de Camuy y Quebradillas. La población de la Tuna quedó reducida, mientras que su barrio Isabela atraía mayor número de vecinos por su prosperidad. En el 1818, las autoridades eclesiásticas y civiles acordaron con sus vecinos trasladar la sede del pueblo a Isabela. Las obras de su iglesia a cargo del contratista Gerónimo Carreras fueron suspendidas. Finalmente el 26 de agosto, en procesión solemne con el obispo Mariano Rodríguez Olmedo, el alcalde don Marcelo Porrata, el párroco don Domingo Prieto y los vecinos de la región, seleccionaron el lugar donde se erigiría la iglesia. Se fijó allí una cruz y se bendijo el lugar. Todos se arrodillaron y elevaron una plegaria al Señor. Las familias Avilés, Corchados, Chaves, Piñeiros y Juarbes, entre otras, estuvieron entre sus primeros fundadores. Se conservó el nombre de "Isabela" en homenaje a la reina Isabel de España, con el cual fue oficialmente bautizado el nuevo pueblo el 21 de mayo de 1821. Según el censo de 1828, para esa época Isabela tenía 5,825 habitantes; de éstos 2,310 eran blancos, 1,837 de diferentes castas, 536 esclavos, 124 pardos y 18 morenos. De ellos, 2,926 eran varones y 2,899 eran hembras. Un teniente a guerra regía el pueblo con un Sargento Mayor a cargo de 887 urbanos (en el 1830). Refleja el censo del 1824 que había entonces 18 extranjeros, 15 artesanos y un practicante de medicina. Tenía Isabela 11 casas y 25 bohíos en el pueblo, y una escuela de primeras letras. En el campo había 400 casas y 403 bohíos. Se sembraban piñas, algodón, maíz, tabaco, chinas, yucas, ñames, plátanos, batatas y frijoles. En 1831, don Pedro Tomás Córdoba describe así a la población en las MEMORIAS: Este pueblo está situado en la parte N. y es el último del Departamento de Arecibo. Anteriormente estuvo formado en el interior inmediato al río Guajataca, con el nombre de la Tuna, cuyas ruinas subsisten aún. Colinda por el N. con la mar, por el s. con el Pepino y la Moca y por el O. con Aguadilla. Tiene la extensión N. S. y L. O. tres leguas. Fue trasladado al parage en que hoy se halla en 1819. Este cambio to promovió el Sr. Obispo Dr. D. Mariano Rodríguez de Olmedo, y la situación que tiene en una espaciosa llanura inmediata al mar, lo hace muy alegre y ameno. El partido es muy escaso de aguas, sólo el río Guajataca es el único que corre por la jurisdicción, viéndose los vecinos obligados a hacer pozos y algibes para recoger las aguas. Los terrenos son de los mejores de la Isla, producen toda clase de granos, muy buen café, tabaco y caña. El territorio está dividido en los barrios de Isabela, Guayabos, Arenales, Palo Mora, Jobos Abajo, Bejuco, Guerrero, Jobos Arriba, Llanadas, Galateo, Coto y Salto. Conserva algunas maderas útiles de ausubos, capaes y algarrobos. Los caminos son buenos en tiempo de seca y se ha formado con sólidez el que dirige al pequeño puerto que está inmediato al pueblo.. En el 1821 se había colocado la primera piedra de la iglesia parroquial, cuyas obras finalizaron en el 1837, bajo la advocación de San Antonio de Padua. El terremoto de San Fermín que sacudió la Isla en el 1918, destruyó la iglesia. Un nuevo templo la sustituyó a un costo de $52 mil. Las bóvedas y la cúpula fueron construidas en concreto armado. Los frailes Dominicos holandeses se hicieron a cargo de la parroquia desde el 1905. Luego, en el 1969 pasó a los padres Trinitarios españoles. A continuación la lista de sus registros parroquiales, los cuales le dan una idea hasta dónde puede remontarse en la búsqueda de sus antepasados. Iglesia de Isabela Lista de los Registros parroquiales por años: Bautismos Matrimonios 1756-1773 (faltan folios) 1774-1781 (deteriorado), 1782-1784, 1792-1802, 1802-1816 (deteriorado), 1817-1855 (blancos, pardos, esclavos) 1818-1825 (blancos, pardos, esclavos) 1825-1828, 1829-1834, 1829-1842, 1834-1841, 1842-1848, 1848-1852, 1848- 1855, 1852-1855, 1855-1859, 1855- 1861, 1855-1871 E, 1860-1861 BP, 1861-1864, 1864-1868, 1868-l870, 1870-1873, 1871-1874, 1873-1874, 1873-1877, 1875-1877, 1877-1879, 1879-1881, 1882-1883, 1883-1886, 1886-1888, 1888-1891, 1891-1894, 1894-1898, 1898-1902, 1902-1903, al presente. 1750-1784, 1808-1818, 1818-1834, 1818-1860, 1834-1850 (blancos), 1851-1859, 1859-1867, 1867-1873, 1874-1877, 1877-1891, 1891-1908, 1909-1915, 1915-1927, 1927-1936, 1936-1941, 1941-1951 Defunciones 1750-1774, 1784-1797, 1797-1812, 1812-1822, 1823-1834, 1835-1849, 1843-1859, 1852-1856, 1856-1860, 1861-1866, 1866-1870, 1870-1874, 1874-1877, 1877-1879, 1879-1884, 1884-1889, 1889-1898, 1898-1904 Confirmaciones 1860-1882 FUENTES: Rodríguez León O.P., Mario A., "Los registros parroquiales..."; Marvel, Thomas y María Luisa Moreno, "La arquitectura de templos parroquiales de Puerto Rico"; De Córdoba, Pedro Tomás: Memorias geográficas, históricas, económicas y estadísticas de la isla de Puerto Rico. Tomo II, 1831. Riollano Girald, Arturo: "Isabela, Notas para su historia", 1983. Abbad Lasierra, fray Iñigo: "Historia Geográfica, Civil y Natural de la Isla de San Juan Bautista de Puerto Rico. Archivo General de Puerto Rico, Fondo de Obras Públicas, serie Edificios religiosos; Fondo de los Gobernadores Españoles, serie municipios.

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