CRISTO VIENE A TRAERNOS LA PAZ
- Misa de Gallo
Y
EL PAPA PIDE A DIOS QUE SALVE A LA HUMANIDAD
DE LA GUERRA (Juan Pablo II)
- Mensaje de navidad
Nochebuena: 1er. mensaje de Benedicto XVI
Navidad: mensajes del Papa Benedicto XVI
Alegría, sobriedad caracterizan Navidad (Benedicto XVI)
El ángel del autobús
El primer pesebre de Navidad
Convierte tu casa, cuerpo, patria en casa
de Nazaret
Juan Pablo II: 25 aniversario
Visite nuestra sección Amén
Navidad: música para tu fiesta
MISA DE GALLO: CRISTO VIENE A TRAERNOS LA
PAZ
CIUDAD DEL VATICANO, 25/12/03 (VIS).
medianoche el Santo Padre celebró en la basílica vaticana
la Santa Misa del Gallo
en la solemnidad
de la Natividad del Señor
2003. Concelebraron
con el Papa 30 cardenales.
Durante el canto
del Gloria algunos niños
de diversos continentes
depositaron flores ante
la imagen del Niño
Jesús.
En la homilía, Juan Pablo
II dijo que en
las palabras del profetas
Isaías "Puer
natus est nobis, filius
datus est nobis",
"se encierra la verdad
sobre la Navidad.
(.) Nace un Niño. Aparentemente,
uno de tantos
niños del mundo. Nace un
Niño en un establo
de Belén. Nace, pues, en
una condición de
gran penuria: pobre entre
los pobres. Pero
Aquél que nace es 'el Hijo'
por excelencia.
(.) También nosotros, como
los pastores desconocidos
pero afortunados, corramos
para encontrar
a Aquél que cambió el curso
de la historia".
"¡Oh Niño -exclamó- que has querido tener como cuna
un pesebre; oh Creador
del universo, que
te has despojado de la
gloria divina; oh
Redentor nuestro, que has
ofrecido tu cuerpo
inerme como sacrificio
para la salvación
de la humanidad! Que el
fulgor de tu nacimiento
ilumine la noche del mundo.
Que la fuerza
de tu mensaje de amor destruya
las asechanzas
arrogantes del maligno.
Que el don de tu vida nos
haga comprender
cada vez más cuánto vale
la vida de todo
ser humano".
"¡Demasiada sangre corre todavía sobre la tierra!
¡Demasiada violencia y
demasiados conflictos
turban la serena convivencia
de las naciones!
Tú vienes a traernos la
paz. ¡Tú eres nuestra
paz! Sólo tú puedes hacer
de nosotros 'un
pueblo purificado' que
te pertenezca para
siempre, un pueblo 'dedicado
a las buenas
obras'".
El Papa pidió a la Virgen
María, que nos
diera sus "ojos para contemplar
con
fe al Niño"; su "corazón
para adorarlo
con amor. En su sencillez,
el Niño de Belén
nos enseña a descubrir
el sentido auténtico
de nuestra existencia".
"¡Oh Noche Santa y tan esperada, que has unido a Dios y al
hombre para siempre! Tú
enciendes de nuevo
la esperanza en nosotros.
Tú nos llenas -terminó-
de extasiado asombro. Tú
nos aseguras el
triunfo del amor sobre
el odio, de la vida
sobre la muerte".
HML/MISA DEL GALLO/. VIS 031229 (380)
EL PAPA PIDE A DIOS QUE
SALVE A LA HUMANIDAD
DE LA GUERRA
CIUDAD DEL VATICANO, 25
DIC 2003 (VIS). -
En el tradicional Mensaje de Navidad, que leyó desde el atrio de la Plaza de
San Pedro, el Papa pidió
a Dios que salvara
a la humanidad de las guerras
y conflictos
y de la plaga del terrorismo
y la violencia.
Juan Pablo II dijo que
con el nacimiento
del Salvador "una ola de
ternura y esperanza
nos llena el ánimo, junto
con una profunda
necesidad de intimidad
y paz. (.) Junto al
pesebre, el árbol de Navidad
con el centelleo
de sus luces, nos recuerda
que con el nacimiento
de Jesús florece de nuevo
el árbol de la
vida en el desierto de
la humanidad. El pesebre
y el árbol: símbolos preciosos,
que transmiten
a lo largo del tiempo el
verdadero sentido
de la Navidad".
El Hijo de Dios, afirmó el Papa, "entró en la historia
de cada persona que vive
sobre la faz de
la tierra. Ya está presente
en el mundo como
único Salvador de la humanidad.
Por esto
nosotros le pedimos: 'Salvator
mundi, salva
nos'!".
"Sálvanos -exclamó- de
los grandes males
que afligen a la humanidad
al inicio del
tercer milenio. Sálvanos
de las guerras y
de los conflictos armados
que devastan regiones
enteras del globo; sálvanos
de la plaga del
terrorismo y de tantas
formas de violencia
que torturan a personas
débiles e inermes.
Sálvanos del desánimo para
emprender los
caminos de la paz, ciertamente
difíciles,
pero posibles y por tanto
obligados; caminos
apremiantes, siempre y
doquier, sobre todo
en la tierra donde naciste
tú, Príncipe de
la Paz".
El Santo Padre pidió a la Virgen que nos hiciera "capaces
de reconocer en el Niño
(.) al Salvador anunciado,
que trae a todos la esperanza
y la paz. Contigo
lo adoramos y decimos confiados:
tenemos
necesidad de ti, Redentor
del hombre, que
conoces las expectativas
y ansias de nuestro
corazón. ¡Ven y permanece
con nosotros, Señor!
¡Que la alegría de tu Navidad
llegue hasta
los últimos confines del
universo!".
Después del mensaje, el
Papa felicitó la
Navidad en 62 lenguas a
los fieles presentes
en la Plaza de San Pedro
y a cuantos lo escuchaban
por la radio y la televisión
y posteriormente
impartió la bendición "Urbi
et Orbi"
(a la ciudad y al mundo).
MESS/URBI ET ORBI/. VIS 031229 (390)
| CURAS FELICES | ORACIONES POR LAS VOCACIONES |
| ASESINATO DEL ARZOBISPO ROMERO |
| MI AMIGO Y MENTOR: EL PADRE ALVARO |
| SECCIÓN AMÉN | LIBROS CATÓLICOS |
| CARTA A DIOS |
|
|