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Lares
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El movimiento clandestino separatista
ajo el manto de la secretividad, los separatistas boricuas del oeste de
la Isla iniciaron la creación de células
representativas del Comité Revolucionario
de Puerto Rico, que había fundado Betances
en Santo Domingo. Las de los pueblos se les
llamaba Juntas, y en las de los campos Legaciones.
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Matías Brugman [ver
foto a la derecha], nacido
en Nueva Orleáns,
estado de Luisiana y cuyo
territorio había
pertenecido a España, y
de padres de Curazao
y Saint Domingue (Haití),
quien desde los cinco
años había llegado
a nuestra patria
y se había hecho tan puertorriqueño
como el que más,
presidió la primera junta:
la Capá Prieto en
Mayagüez. A ésta le siguieron
las de Centro Bravo
en Lares [ver miembros
en foto] dirigida
por el venezolano-puertorriqueño
Manuel Rojas. Porvernir,
presidida por Manuel Cebollero en San Sebastián del Pepino; Lanzador del
Norte, por Manuel María González, en Camuy;
y Lanzador del Sur en Ponce, encabezada por
Carlos Elió Lacroix. |
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Para comunicarse entre sí, los miembros conspiradores
utilizaban claves secretas,
santos y contraseñas.
Se identificaban al saludarse,
pues al estrecharse
las manos presionaban dos
veces el dedo meñique.
Si se correspondían, uno
de ellos preguntaba:
--- ¿En qué se emplea usted?
El otro debía
responder:
--- En trabajos útiles.
--- Déme una letra.
--- L, respondía el otro.
--- M, replicaba el interpelado.
Las "
L y M" de Libertad o Muerte.
Descubren la conspiración, adelantan la fecha
La revolución estaba pautada para estallar
en Camuy el 29 de septiembre de 1868, día
de San Miguel, para contar con los esclavos
a quienes se les daba libre ese día de fiesta.
El hijo del alcalde se hallaba entre los
conspiradores. Mas el servicio secreto español
logró obtener información sobre la planificada
subversión y sus células. Allanaron la casa
de Manuel María González y confiscaron documentos
comprometedores a la causa. [vea en detalle el mapa con las células secretas]. |
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Manuel Rojas [foto
a la derecha] y su cédula
revolucionaria de
Lares (Centro Bravo), decidieron
que podían salvar
el elemento sorpresa adelantando
la fecha para el
23 de septiembre. Decidió
que no podían aguardar
por Betances que se
encontraba en el
exilio y estaba ajeno a
los eventos de los
arrestos recientes.
[Ver otra foto ampliada de Manuel Rojas]. |
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Esclavos en busca de su liberación, jornaleros,
agricultores y campesinos
explotados especialmente
por los comerciantes peninsulares,
dueños
de propiedades hartos de
los impuestos, fueron
movilizados y se dieron
la mano para ejecutar
la primera gran acción
concertada para establecer
en Puerto Rico una república
democrática.
[Ver gráfica: ocupaciones de los rebeldes].
Atacan y ocupan Lares
Tomada la alcaldía, constituyeron el gobierno
provisional, con Francisco Ramírez Medina
[foto a la derecha] como presidente; Federico
Valencia, ministro de Hacienda; Manuel Ramírez Medina, ministro de Gobernación; Clemente Millán
como Ministro de Gracia y Justicia; Celedonio
Abril, ministro de Estado, y Bernabé Pol
para la Secretaría de Gobierno. |
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Caen los héroes, pero el pueblo los conmemora
Al día siguiente, los rebeldes marcharon al
pueblo de San Sebastián
del Pepino, donde
estaba constituida
la cédula revolucionaria
Porvenir, presidida
por Manuel Cebollero, natural de Aguada. Mas la noticia de la
alzada revolucionaria
había llegado a la
guarnición española
en Aguadilla. |
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Bandera revolucionaria
usada
en el Grito de Lares
en 1868. |
Los milicianos, entrenados y bien armados,
aguardaban a los insurrectos
que aparentemente
no sospechaban de su llegada
y apertrecho
en la plaza pública.Se
entabló un fiero encuentro
a balazos. Manuel León
cayó al suelo mortalmente
herido.
Los refuerzos de
las milicias españolas [a
la izquierda foto
de un miliciano español
con su rifle] que
llegaron a toda prisa desde
la población de Moca
provocó el desenlace
de la gesta insurgente
lareña. En la refriega
cayeron mortalmente
heridos de bala Pedro
Angleró, Leopoldo
Plumey, Pablo Rivera. El
30 de septiembre,
Matías Brugman, quien se
había unido con su
gente de Mayagüez, y el
dominicano Baldomero
Baurén fueron ultimados
sorprendidos mientras
dormían exhaustos.
El 5 de octubre los
militares rodearon a
Joaquín Manuel Parrilla, quien se batió de inmediato con sus atacantes.
Ya sin balas, y exclamando "¡Parrilla
no se rinde!", cayó muerto. Se dice
que el ofical que lo ultimó tomó el pañuelo
que Parrila llevaba al cuello en gesto de
respeto hacia el valeroso leñador rebelde. |
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Derrotados por tropas españolas mejor armadas,
los revolucionarios
de Lares optaron por
la acción guerrillera
o evadir su búsqueda
en las montañas,
quizás en espera de la goleta
El Telégrafo. La
embarcación artillada, sin
embargo, había sido
confiscada con sus armas
y municiones en Saint
Thomas, luego que el
presidente dominicano
Báez cedió a las presiones
diplomáticas españolas
y retiraba su apoyo
a la causa betanciana. |
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Lares a inicios del
siglo pasado. |
Alrededor de 551 personas fueron arrestadas vinculadas al Grito de
Lares, 80 de las cuales
murieron en las cárceles
de Aguadilla [ver lista] y Arecibo, víctimas de la fiebre amarilla.
Rojas y otros siete revolucionarios fueron
setenciados a morir en garrote. Mas el 17
de septiembre, los generales Prim y Serrano
habían derrocado en España al gobierno conservador
de Isabel II. El nuevo gobierno de corte
liberal de la llamada Revolución Gloriosa,
había nombrado en la Isla al gobernador y
mariscal Juan Julián Pavía Lacy [foto a la
derecha]. Este conmutó la sentencia a diez
años de prisión, y el 24 de enero de 1869,
fue aprobada una amnistía general, la que
puso en libertad a todos los acusados y presos
políticos. |
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Los independentistas no lograron reponerse
de esa derrota y las persecuciones continuaron
contra ese ideal. Betances murió en Francia,
el 16 de septiembre de 1898.
Mariana Bracetti falleció a principios del siglo 20 en un
campo de Aguada,
pobre y olvidada.
No fue hasta la época nacionalista de Albizu
Campos que se inició
la conmemoración de
la insurgencia lareña,
la cual se ha repetido
desde entonces. |
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Mariana Bracetti
Ver foto ampliada |
Bajo el gobierno de ocupación norteamericana,
dichos actos fueron vistos
como un desafío
cultural y político. El
portar y exhibir
la bandera puertorriqueña
fue símbolo de
subversión. En décadas
recientes, y en particular
en el presente a 141 años
de la gesta de
Lares, nuestra insignia
nacional es enarbolada
con orgullo y patriotismo.
Como si la semilla
plantada por Betances y
los revolucionarios
del 1868, hubiera comenzado
a germinar.
(Volver a la p. 1).
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"Creo que es una afrenta a la dignidad nacional
de este pueblo. Es
una falta de respeto que
estos genocidas,
estos asesinos, estos malvados,
estos sinvergüenzas
se hayan atrevido a mancillar
el aniversario 137
de la declaración de la
República de Puerto
Rico con un acto como
este".
- Rosa Meneses, presidenta del Partido Nacionalista, ante
la muerte a tiros
por el FBI del líder Machetero,
Filiberto Ojeda Ríos,
el 23 de septiembre
del 2005, día de
la conmemoración del Grito de Lares.
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