Milagros Amell

n 1823, a la tierna edad de catorce años, viene por primera vez a Puerto Rico Agustín Amell Milá. Su obligación era rescatar unos bienes que tenía la familia en Aguadilla. En 1836 residía en Aguadilla con su familia, siendo su esposa Maria Mercedes Amell y Coll, la hija de don Francisco Amell Sardá que residía en Aguadilla desde 1825.

Agustín regresa a Sitges por enfermedad de su hijo, y luego vuelve a Puerto Rico, donde retiró su capital del negocio. La muerte de uno de sus hijos aceleró su retorno a Sitges. Su hijo Eduardo luego de estudiar en Inglaterra quiso regresar a Aguadilla. En esta ciudad se enamoró y casó con la joven de sociedad Avelina Méndez Quiñones, hija de don Ramón Méndez de Arcaya y doña Avelina Quiñones y Talavera, nieta de don Francisco de Quiñones y López de Segura y María Vives y Hernández del Río. Sus ancestros habían sido de los fundadores de Moca y Aguadilla (Ver: cd/censos de Moca). Cuenta la tradición pueblerina que cuando Avelina Méndez Quiñones se casó con Eduardo Amell Amell, don Ramón Méndez de Arcaya le regaló a su hija mayor una hermosa casa que estaba ubicada entre la Calle de la Real Marina y la Calle de los Arcos (hoy Corchado) y llegaba hasta la Calle Alfonso XII (hoy Betances). La residencia luego que la familia se marchó a Sitges la adquirió don Eduardo Méndez Quiñones casado con doña Mercedes Jiménez Serra.

Pedro Amell Milá, hermano de Agustín llegó a la Isla y comenzó a trabajar desde los trece años. Aparece en Aguadilla en 1832, y hacia 1848 ya era socio de la firma Amell Juliá y Cía. Estuvo activo en el comercio hasta 1866. Se casó con María Gutset en 1843. Él era de los que iban y venían de Sitges a Aguadilla; en unión de Francisco Juliá Palmeta levantó el capital de la Sociedad.

Pedro Amell Milá, hermano de Agustín, llegó a Puerto Rico y comenzó a trabajar desde los trece años, y en Aguadilla a partir de 1832. Hacia 1848 ya era socio de la firma Amell Juliá y Cía. Estuvo activo en el comercio hasta 1866. Se casó con María Gutset en 1843. Iba y venía de Sitges a Aguadilla. En unión de Francisco Juliá Palmeta levantó el capital de la Sociedad.

Escudos de Sitges, Barcelona, y los Amell

Para 1823 llega a Aguadilla Francisco Sardá Parellada, hijo de Francisco Sardá y Marina Parellada, naturales de Sitges, Barcelona. Viene como comerciante y trabajará en la Casa Mercantil Amell Sardá y Cía. Al poco tiempo regresó a España y en 1827 se embarcó de nuevo hacia Aguadilla. Se casó con la española María Sariol. Pertenece al grupo denominado "emigración cerrada". Estas personas iban y venían del Viejo continente a la Isla y se casaban con españolas, eran "clasicistas".

En ese mismo año salió de Sitges Manuel Coll Bori, casado con Antonia Bargadá Arandes, española, y tuvieron un hijo, Manuel, que en 1834, a la edad de catorce años vino a trabajar a San Juan y luego a Aguadilla a la firma Amell y Sardá.

Otro catalán que se establece en esta Plaza en 1824 es don Antonio Ferrer y Mari. Natural de Villanueva, Barcelona, hijo legítimo de Félix Ferrer y Gertrudis Mari. Contrajo matrimonio en Aguadilla en 1825 con Serafina Alfonso y Sierra. Ella era hija de don Pedro Alfonso y doña María Sierra.

Sala de la residencia de los Amell en Barcelona

Es interesante la presencia de Juan Macaya de los Olivos, natural de Pálamos, Gerona. Era hijo legítimo de Mariano Macaya y Francisca de los Olivos. Contrajo matrimonio en primeras nupcias en San Juan con Josefa Masferrer, enviuda y pasó a Aguadilla para 1826 como comerciante. Macaya tuvo varias propiedades urbanas en Aguadilla incluyendo su almacén. Además poseyó algunas propiedades rurales entre ellas una hacienda en 1838. Se casó en segundas nupcias con la dominicana Narcisa Padrón. Un año más tarde José Antonio Masferrer natural de Bisbal, Gerona, se retiró a vivir a Aguadilla con su esposa Teresa Caraver, procedentes de Santo Domingo. Ambos mueren en 1827.

En 1827 también se avecinó a esta ciudad José Simón, natural de Gerona, hijo de José Simón. Se casó con la aguadillana Rosa Hernández de la Rosa, hija de Francisco Hernández y María Luisa de la Rosa.

En 1829, Juan Colomer Tió es solicitado por sus dos tíos que para la época tenían comercio en Aguadilla a venir como dependiente de tienda a este lugar. El joven era de Arenys de Mar, Barcelona. Colomer gozaba de veintiún años de edad cuando llegó a esta población.

Con fecha de 1829, se estableció en Aguadilla don José María Rovira de los Olivos, natural de Barcelona. Hijo legítimo de Nicolás Rovira y María de los Olivos. Se casó con Clemencia Domenech de la Rosa, natural de Aguadilla (Ver: apellido Domenech en defunciones del siglo 19). Hija de don Antonio Domenech Ferrer, Síndico Procurador, y doña Antonia de la Rosa y Cardona, hija legítima de Juan Bautista de la Rosa y Luisa Cardona. Esta familia estaba dedicada a la agricultura y tenían propiedades en diferentes barrios de Aguadilla. Foto: Teresa Elena Rovira Cerezo.

Para la misma fecha se instaló en esta ciudad el catalán Jaime Mata Cenadal, hijo de Juan Mata y Sabina Cenadal, naturales de Barcelona. Se casó en esta ciudad con la venezolana Escalatina Matamayol, hija de Rafael y Jacinta.

Siguiendo a su paisano en el mismo año de 1829, arribó a esta localidad José Pérez y Arabí, natural de Ibiza. Hijo de José Pérez y Francisca Arabí. Contrajo nupcias en Aguadilla con Marisol Tapia Frejar, naturalizada de Barimar, Venezuela, hija de Elgutino Tapia y María Frejar.

Cayetano Cruxent y Lalby arribó al puerto de Aguadilla para 1830. Era natural de Mataró. Gerona, e hijo de Juan Cayetano Cruxent y Desideria Lalby. En Aguadilla se casó con Genoveva Rousellet y Chaudern, hija de don Luis Rousellet, quien había emigrado de Santo Domingo y había establecido una botica en Aguadilla. Su madre era Susana Chaudern y Mercader.

Natural de Reus de Tarragona, Pedro Garriga Samada llega a Puerto Rico en 1831, luego se establece por un tiempo en Aguadilla. Es casado con Nicolasa Martínez Echenique, natural de Santander. Fue trasladado a Ponce al Batallón de Voluntarios de la Perla del Sur.

Vista playera reciente de Sitges, Barcelona

El tronco de la familia Veray de Aguadilla fue don José Sixto Veray Celaña, hijo de Francisco de Asís Veray y Viñas y Catalina Celaña Fobrás. Contrajo matrimonio en esta ciudad con María Josefa Llamas y Suárez de Mendoza, hija de Juan Llamas y Rosca y María Dominga Suárez y Esteves, en 1823.

En 1830 se constituyó en Aguadilla el tronco de la familia Baster Domenech con el enlace matrimonial catalán Agustín Baster Domenech con la holandesa Ana Jerónima Van Vylder y Van der Dijs. Ella era hija de Friedrich Ever Vylder y María Elizabeth Van der Dijs y Van Jerusalén. Él era natural de Gerona España, nacido en 1795; murió en Aguadilla en 1845.

Baster Juan, natural de Cataluña, se casó en Aguadilla con Ana de Felder Van der Dijs, ciudadana holandesa. Baster Domenech, Gerónimo, hermano de los anteriores, contrae matrimonio en Aguadilla con María Magdalena del Valle González de Movellán, hija de Francisco del Valle González de Movellán y Feliciana Pérez y de Arce.

Don Miguel Coll llegó a esta ciudad en 1835, fue Regidor del ayuntamiento de Aguadilla y luego se trasladó a Lares dónde ocupó el puesto de alcalde.

Jaime Campillo Garriga, natural de Barcelona fijó su residencia para 1835 en Aguadilla como dependiente de una tienda. Su hermana también se domicilia en esta ciudad y contrae matrimonio con el catalán Miguel Enseñat.

En la década de los 1840 llegaron muchos catalanes a esta plaza. Encontramos a los hermanos Casa Bley, Salvador y Victoriano, naturales de Tarragona, que como tantos otros vinieron a trabajar a comercios ya establecidos en la localidad. Victoriano Casa Bley viene a trabajar con su padre que se había establecido en esta localidad en 1846 y luego le dejó el negocio a sus hijos.

Don Pablo Janer y Planes nacido en Incas, Mallorca, se avecinó a Aguadilla y luego pasó a Moca donde hacia 1839 era Síndico de dicho pueblo. Era hijo de Andrés Miguel Janer y Francisca Ana Plaza. Se distinguió como educador, primero en Aguadilla y luego en Maricao con el reconocido Colegio Janer. Contrajo matrimonio en Aguadilla con Dolores Gil Rodríguez, hija de Juan de Santa Cruz Rodríguez y Paula Pérez.

Edificio universitario Janer

José Ruscalleda Suárez, hijo de Joaquín y Josefa, natural de Blanes, Gerona, se domicilió en Aguadilla. Fue empleado y vino soltero y no se le conoció matrimonio. En 1900 a la edad de 53 años tramitó desde Aguadilla su regreso a España luego del cambio de Soberanía.

Para 1849 Gregorio Rovellant y Sal, nació en San Juan de Horta, Barcelona, hijo de Gregorio y Josefa. Contrajo matrimonio en Aguadilla con Laureana Justiniana Vidal y Talavera. Hija legítima de José Antonio de los Olivos y María Talavera y Ponce. Aquí ya observamos las descendencias de los primeros catalanes en Aguadilla.

Al comenzar el año 1850 llegó a esta Villa José María Ribas Calzada, hijo de José Ribas y de Isabel Calzadas, oriundos de San Feliú de Guixols. En Aguadilla contrajo matrimonio con María Rizar Díaz en 1859. Aquí vemos también una hija de segunda generación en la Isla.
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