La búsqueda genealógica de nuestros antepasados
no puede limitarse a los documentos archivísticos,
registros parroquiales y expedientes gubernamentales.
Debemos incluir las cartas intercambiadas
entre la familia; entrevistar a nuestros
abuelos, bisabuelos y otros familiares de
mayor edad y allegados. Y también incluir
la recopilación de fotos y tarjetas postales
que conservan nuestras familias.
Estas nos pueden revelar en una forma especial
la fisonomía de nuestros ancestros, su situación
económica, cómo vestían, los medios de transportación
de la época, cómo eran las carreteras, las
viviendas de ricos y pobres, las iglesias
y plazas de los pueblos, cómo lucían nuestras
zonas urbanas y rurales a finales del siglo
18 y el siglo pasado, entre otros detalles.
Les presentamos a continuación una muestra
de algunas de estas postales de dichas épocas.
Comuníquese con nosotros si tiene postales y fotos cuyas
copias desee compartir y publicar en "PReb".
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