EL PAPA UNIDO ESPIRITUALMENTE
AL CONGRESO EUCARÍSTICO
INTERNACIONAL EN
MÉXICO
La Eucaristía, luz y vida del nuevo milenio
LA EUCARISTÍA SEA SIEMPRE EL CENTRO DE VUESTRA
VIDA
Eucaristía : presencia real
Oración para después de comulgar
Año Eucarístico: sugerencias y propuestas
Carta apostólica: Señor, quédate con nosotros
Manual del Congreso: Programa, Delegados,
Himno, etc.
Exposición de arte sacro en Guadalajara
La Arquidiócesis de Guadalajara y el Congreso
Eucarístico
Encíclica: Iglesia de Eucaristía (resumen)
Vaticano: 75 aniversario
Origen histórico del Kyrie eléison
Libros, devociones, documentos, encíclicas
sobre la Eucaristía
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Los Congresos Eucarísticos Internacionales
Estos se celebran a ser
posible cada cuatro
años, en la ciudad designada
por el Santo
Padre y según sus indicaciones.
Todo Congreso
debe considerarse Statio
Orbis que ponga
de relieve, tanto en la
preparación catequética
como en la celebración,
el lugar central
de la Eucaristía en la
vida de la Iglesia
y en su misión pro mundi
vita. (Art 15 del
Estatuto del Comité Pontificio
para los Congresos
Eucarísticos Internacionales)
Una pausa de compromiso y de oración
Los Congresos Eucarísticos
“deben considerarse
como una estación (statio)
esto es, como
una pausa de compromiso
y de oración, a la
que una comunidad invita
a la Iglesia universal
o una iglesia local invita
a las demás iglesias
de toda una región, o de
la misma nación
o aun de todo el mundo,
para que unánimemente
se dediquen a considerar
con mayor profundidad
un determinado aspecto
del misterio eucarístico
ofreciendo así un homenaje
de pública veneración,
con el vínculo de la caridad
y de la unidad.
Tales congresos deben ser
un signo auténtico
de fe y de caridad por
la plena participación
de la Iglesia local y la
presencia representativa
de las otras Iglesias”.
(Ritual de la Sagrada
Comunión y del culto de
la Eucaristía fuera
de la Misa, n° 109)
EL PAPA UNIDO ESPIRITUALMENTE CONGRESO EUCARISTICO
MEXICO
CIUDAD DEL VATICANO, 10 OCT 2004 (VIS).
Antes de rezar el Ángelus con los peregrinos
reunidos en la Plaza de
San Pedro, el Papa
recordó que hoy se inaugura
en Guadalajara
(México) el Congreso Eucarístico
Internacional,
dedicado al tema "La Eucaristía,
luz
y vida del nuevo milenio.
"Me uno espiritualmente
-dijo- a este
importante evento eclesial
con el que se
abre el Año de la Eucaristía".
El Santo Padre habló después su carta apostólica,
recién publicada, que comienza
con las palabras
"Mane nobiscum, Domine",
(Señor,
quédate con nosotros).
"Que esa invocación
resuene -dijo- en todas
las comunidades cristianas:
¡Que los fieles, reconociendo
a Cristo resucitado
'al partir el pan', estén
dispuestos a dar
testimonio de El mediante
la caridad!".
"Una expresión privilegiada
de caridad
en la iglesia local -prosiguió-
es la Caritas
diocesana. En Roma, Caritas
celebra el XXV
aniversario de su fundación.
Doy gracias
a Dios por los tantos frutos
de bien que
han madurado en estos años
e invito a la
comunidad eclesial a proseguir
en la obra
de formación y en las actividades
de servicio
a los pobres y a los necesitados".
Acabado el Ángelus, Juan Pablo II saludó a
los participantes en la
Semana Social de
los Católicos Italianos,
que ha tenido lugar
estos días en Bolonia y
cuyo tema ha sido
"Democracia, nuevos escenarios,
nuevos
poderes". El Papa manifestó
el deseo
de que la reunión ofrezca
"nuevos estímulos
para un testimonio cada
vez más incisivo
en todos los ámbitos de
la vida del país".
El Papa finalizó recordando
que el domingo
que viene, "en comunión
espiritual con
todos los participantes
en la clausura del
Congreso Eucarístico Internacional,
presidiré
en San Pedro -dijo- una
celebración solemne
para la apertura del Año
de la Eucaristía
en toda la Iglesia. Invito
a los fieles a
que participen numerosos
en este importante
acontecimiento eclesial,
para rendir un homenaje
coral a Cristo, luz y vida
del nuevo milenio".
ANG/ CONGRESO EUCARISTICO:CARITAS/... VIS
041011 (340)
LA EUCARISTÍA SEA SIEMPRE
EL CENTRO DE VUESTRA
VIDA
CIUDAD DEL VATICANO, 9 OCT 2004 (VIS).
El Papa recibió hoy a un grupo de jóvenes
de la diócesis de Roma
que participan en
la Misión dirigida a sus
coetáneos en preparación
para el Año de la Eucaristía,
cuyo título
es "Jesús en el centro",
y en el
encuentro de representantes
de grupos juveniles
europeos de adoración eucarística.
Estas iniciativas pastorales
en las que han
participado jóvenes de
Europa y de Estados
Unidos "nos introducen
-dijo el Santo
Padre- en este tiempo especial
de gracia
para toda la Iglesia",
el Año de la
Eucaristía.
"Eucaristía y misión son dos realidades inseparables.
(...) No existe auténtica
celebración y adoración
de la Eucaristía que no
conduzca a la misión.
Al mismo tiempo, la misión
presupone otro
rasgo eucarístico esencial:
la unión de los
corazones".
Juan Pablo II pidió a los
presentes que esa
experiencia pastoral, "auténtica
escuela
de comunión y de nueva
evangelización prosiga
y se amplíe. Os animo a
que la creatividad
y la generosidad que habéis
demostrado en
estos días sean un estímulo
para que toda
la Iglesia de Roma mantenga
vivo su espíritu
misionero".
El Papa confió a los jóvenes dos consignas.
"En primer lugar -afirmó-,
el amor por
la Eucaristía. No os canséis
nunca de celebrarla
y de adorarla junto con
toda la comunidad
cristiana, sobre todo el
domingo. Que ocupe
el centro de vuestra vida
personal y comunitaria
para que la comunión con
Cristo os ayude
a tomar decisiones valientes.
En segundo
lugar -continuó-, la pasión
misionera. No
tengáis miedo de testimoniar
la esperanza
(...) que tiene un nombre
preciso: ¡Jesucristo!".
"Para facilitar el encuentro
del mundo
juvenil con una verdadera
espiritualidad
eucarística no os canséis
de formaros en
la escuela de la escucha
de la Palabra de
Dios, de la oración, de
la celebración de
los sacramentos. Recordad
siempre que el
primer lugar de la evangelización
es la persona
humana. (...) En este sentido,
exhorto al
servicio diocesano para
la pastoral juvenil
a que estudie nuevas propuestas
para crear
verdaderas y propias escuelas
de evangelización
para los jóvenes".
El Santo Padre dio las gracias a los jóvenes
"por lo que sois y por
todo lo que hacéis
por Cristo y por la Iglesia.
Os aseguro mi
recuerdo durante la celebración
de la Santa
Misa y la adoración eucarística,
que desde
los años de juventud practico
constantemente.
Quiero que sepáis que siempre
he obtenido
grandes frutos, no sólo
para mí sino también
para todos los que me ha
confiado la Divina
Misericordia".
AC/EUCARISTÍA/JÓVENES ROMA VIS 041011 (420)
Lea un resumen de la encíclica Iglesia de Eucaristía.
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