Sínodo de Obispos en Roma:
unidad y compromiso en
la Eucaristía
"En el Crucifijo parece que está el Señor,
pero no está; en la Eucaristía parece que
no está, pero está".
Origen histórico del Kyrie eléison
Mi amigo y mentor: el Padre Alvaro
Censura
Rafael Cordero Molina: Maestro de próceres,
Siervo de Dios
Carta apostólica: Señor, quédate con nosotros
Encíclica: Iglesia de Eucaristía (resumen)
Tallas de santos de cara a la historia
Asesinato del arzobispo Romero
Sor Lucía: vidente de Fátima
Sínodo eucarístico: más noticias, documentos
Libros, devociones, documentos, encíclicas
sobre la Eucaristía
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Cardenal Francis Arinze
Nació el 1de noviembre de 1932, en Eziowelle,
Arquidiócesis de Onitsha, en Nigeria, África.
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CIUDAD DEL VATICANO, 13 OCT 2005 (VIS).
a Oficina de Prensa de la Santa Sede, ha
tenido lugar la segunda conferencia de prensa
sobre la XI Asamblea General Ordinaria del
Sínodo de los Obispos, una vez presentada
la Relatio post disceptationem (el documento
que resume brevemente los temas centrales
de las discusiones de los padres sinodales).
Han participado en el acto
los cardenales
y presidentes delegados
del Sínodo Francis
Arinze, Juan Sandoval Íñiguez
y Telesphore
Placidus Toppo; el arzobispo
John Patrick
Foley, Presidente de la
Comisión para la
Información y el obispo
Sofron Stefan Mudry,
O.S.B.M., vicepresidente
de la misma Comisión.
El cardenal Arinze subrayó
que del Sínodo
le había impresionado ante
todo el compromiso
de todos los participantes
en la transmisión
de la fe y la importancia
atribuida al "ars
celebrandi" para que
esa fe de la que
el pueblo de Dios se ha
nutrido en la iglesia
les acompañe a la salida
del templo y les
aliente a compartir con
los demás lo que
han recibido.
Por su parte, el cardenal Sandoval se refirió
a la profundidad de la fe en la Eucaristía
y eligió como ejemplo de esa fe las palabras
de un discapacitado que, antes de recibir
la comunión y como no podía hablar, escribió
en su ordenador: "En el Crucifijo parece
que está el Señor, pero no está; en la Eucaristía
parece que no está, pero está".
"Todos -dijo-compartimos esa fe en la
presencia real de Cristo". Después citó
como uno de los momentos centrales del Sínodo
la presencia y las palabras de Benedicto
XVI el primer día de la asamblea, así como
la participación del Papa "como un padre
sinodal más" en la hora de discusión
libre que concluía los trabajos vespertinos.
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Cardenal Juan Sandoval Íñiguez
Arzobispo de la Arquidiócesis de Guadalajara.
Nació en Yahualica, Jalisco, México, el 28
de marzo de 1933.
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El cardenal Toppo recalcó la capacidad de
agregación del Sínodo, que ha convocado a
personas de los cinco continentes "unidas
por la misma fe" y observó que en Asia,
su continente de procedencia, donde conviven
tantas religiones, la señal de identidad
de los católicos es la unidad en la Eucaristía
bajo la figura del Santo Padre. Recordó también
que el presidente de la delegación india
que participó en los funerales de Juan Pablo
II, impresionado por la participación y la
unidad de los católicos en la ceremonia le
dijo: "Hoy he experimentado la presencia
de Dios".
La escasa asistencia a
la misa dominical
en los países occidentales
fue en cambio
el tema que más llamó la
atención del arzobispo
Foley durante esta asamblea
sinodal, mientras
que los momentos más emocionantes
fueron
los protagonizados por
algunos padres sinodales
y delegados de los países
de Europa Central
y Oriental que relataron
las persecuciones
y sacrificios padecidos
bajo los regímenes
totalitarios.
Concluyó el obispo Mudry,
que insistió en
la fe en la Eucaristía
tanto de los católicos
como de los ortodoxos y
en la enseñanza de
esta fe, comenzando por
la familia, para
citar después la labor
de los sacerdotes
y el papel en este sentido
de la liturgia,
mencionando que quizá en
las iglesias orientales
los "signos visibles
de la santidad",
con la presencia del tabernáculo,
son más
perceptibles que en las
occidentales
Al final de la rueda de prensa, un periodista
preguntó por qué frente al problema de la
escasez de sacerdotes en algunas regiones
del mundo se sigue poniendo en duda como
solución la ordenación de varones casados.
El cardenal Toppo respondió que "el
verdadero problema es la crisis de fe; la
falta de sacerdotes es un síntoma de esta
crisis". En este sentido, el cardenal
Sandoval añadió como causas de esta escasez,
"la falta de fe, la secularización,
el cerrar la ventana al infinito". El
obispo ucraniano Mudry señaló que a pesar
de que en las Iglesia orientales católicas
hay sacerdotes casados, esto no soluciona
el problema anterior porque "también
deben dedicar tiempo a la familia, al estudio,
y es difícil que se puedan trasladar a otro
lugar para continuar su misión si se lo pide
el obispo".
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Cardenal Telesphore Placidus Toppo
Nació el 15 de octubre de 1939 en Chainpur,
de la diócesis de Gumla, en la India. Es
el octavo hijo de Ambrose Toppo y Sofía Xalxo,
quienes tuvieron diez hijos. |
Por lo que concierne a la cuestión de la
no admisión a la comunión eucarística de
las personas divorciadas, el cardenal Arinze
señaló que la Iglesia "muestra compasión
ante estas personas que sufren, y aunque
no pueden comulgar -porque su situación no
refleja la imagen de unidad entre Cristo
y la Iglesia (el esposo y la esposa)-, siguen
siendo miembros de la Iglesia".
Refiriéndose a la invitación
en las intervenciones
de estos días de una mayor
homogeneidad de
la inculturación, el cardenal
Toppo subrayó
que ésta "es esencial,
y es la expresión
de la fe de un pueblo".
El cardenal
Sandoval añadió finalmente
que "lo importante
es que los cánticos, la
danza, el color,
etc, ayuden a la interiorización,
a unirse
al Señor y que la ceremonia
no se convierta
en un espectáculo para
divertir sin más".
SE/RUEDA DE PRENSA/... VIS 051013 (820)
DECIMOSEXTA CONGREGACION
GENERAL
CIUDAD DEL VATICANO, 12 OCT 2005 (VIS).
sta tarde, en el Aula del Sínodo, se celebró
la decimosexta Congregación General, en la
que se presentó la "Relatio post disceptationem",
relación posterior a la discusión, e intervinieron
los auditores y auditoras. El presidente
delegado de turno fue el cardenal Telesphore
Placidus Toppo. A esta sesión vespertina
asistieron 239 padres sinodales.
La Relación posterior a la discusión del
cardenal Angelo Scola, Relator General, se
abre haciendo referencia a Juan Pablo II,
que quiso dedicar al tema "Eucaristía:
fuente y cumbre de la vida y de la misión
de la Iglesia", esta XI Asamblea General
Ordinaria del Sínodo de los Obispos, y a
la meditación con que el Papa Benedicto XVI
dio inicio a la I Congregación General.
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El cardenal afirma "no haber hecho una
síntesis, sino una confrontación de las intervenciones,
también debido a la vastedad de los temas
tratados y a las sensibilidades puestas en
juego. La introducción se concluye enunciando
la orientación de fondo surgida, en línea
de principio, de las intervenciones: la superación
de todo dualismo entre doctrina y pastoral,
entre teología y liturgia".
La Relación consta de dos partes: la Primera
Parte: "Educar el Pueblo de Dios en
la fe en la Eucaristía", está subdividida
en cinco capítulos. En el I, se afirma que
numerosas intervenciones evidenciaron las
dificultades objetivas que el pueblo cristiano
encuentra hoy, en creer y en celebrar la
Eucaristía, y surgió la grave responsabilidad
de los pastores relativas a la evangelización
y a la nueva evangelización.
En el II capítulo, se exponen
los puntos
principales de los contenidos
esenciales
de este gran misterio,
surgidos de la necesidad
de educar a los creyentes
en una fe integral
eucarística.
En el III capítulo se subraya
el lugar de
gran relieve que tuvo,
en la discusión, el
nexo entre la Eucaristía
y el septenario
sacramental.
El IV capítulo trata sobre
la Eucaristía
y el pueblo sacerdotal,
los fieles que en
su reunirse juntos descubren
nuevamente la
propia pertenencia a la
Iglesia, y se habla
de "Dies Domini",
obispo y presbíteros,
diáconos permanentes y
ministros extraordinarios
de la Comunión, parroquia
y pequeñas comunidades,
familia, vida consagrada,
jóvenes.
Por último, el V capítulo,
recoge el tema
Eucaristía y misión: para
ser misionera,
la Iglesia, debe ser también
profundamente
eucarística.
La Segunda Parte, "La
acción eucarística",
consta de cuatro capítulos.
En el I, el Relator
hace notar que no pocos
padres recordaron
con gratitud el benéfico
influjo que la reforma
litúrgica actuada a partir
del Concilio Vaticano
II tuvo en la vida de la
Iglesia (...) junto
a la urgencia de una mayor
atención por el
"ars celebrandi",
(...) después
de haber tratado, en el
II capítulo, acerca
de la estructura de la
celebración litúrgica.
En la Conclusión, que precede
las diecisiete
Cuestiones para los Círculos
Menores con
los que se cierra la Relación,
el cardenal
Scola afirma que "el
trabajo que les
espera ahora a todos los
Padres sinodales
constituye la parte más
delicada, de la que
surgirán las "Propuestas"
que ofreceremos
al discernimiento propio
del carisma del
Sucesor de Pedro".
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